Cierre del Centro Adroga

Hoy, a traves del Diario de la Ribera (www.diariodelaribera.net) nos ha llegado la triste noticia del cierre del Centro Adroga. Es lamentable que hasta un Centro como Adroga tenga que sufrir los efectos de la crisis, dejando a mucha gente sin la ayuda necesaria para su rehabilitación e inserción social. Agradecer a Adroga la buena colaboración que siempre hubo entre el centro y este Ayuntamiento.

Aqui os dejo el artículo:

El Centro Adroga de Castrillo de la Vega cierra por falta de ayudas públicas ya comprometidas.

El Centro Adroga de Castrillo de la Vega, dirigido por los Misioneros Espiritanos, dedicado a la rehabilitación e inserción social de personas drogodependientes y alcohólicas, cierre sus puertas por falta de apoyo económico de las administraciones públicas.
Desde 1985, los Misioneros Espiritanos han colaborado estrechamente con la asociación Adroga para la puesta en marcha y el desarrollo de este centro.
Hasta hoy, más de 2.500 personas, jóvenes en su mayor parte, se han beneficiado de la atención asidua de un personal competente y totalmente entregado a esta tarea bastante difícil, pero necesaria.
Los Misioneros Espiritanos indican que “hace casi dos años que intentamos salvar este centro, concertado con la Junta de Castilla y León así como con el Ayuntamiento de Madrid. Una baja de las subvenciones de la Junta, los retrasos de pagos por parte de las dos entidades, y el anuncio hace unos días por parte de Madrid de la ruptura de nuestro acuerdo con ellos, nos obligan a cerrar dicho Centro terapéutico. Nos deben hoy día 350.000 euros”.
El Ayuntamiento de Madrid acaba de pagar el mes de mayo y la Junta de Castilla y León solo les ha pagado el 20% de lo prometido.
“Debemos hasta 7 nóminas al personal que ha aceptado reducir un 22% su sueldo, debemos meses de pago a unos proveedores que han entendido nuestra situación económica y a pesar de todo han aceptado esperar más. Es imposible seguir de esta manera”, argumentan desde los Misioneros Espiritanos.
Añaden en un comunicado de prensa que “hasta el último momento hemos atendido lo mejor posible a estos chicos. Intentamos colocarlos ahora en otros centros, pero algunos tendrán que volver a la calle o a la cárcel, a pesar de los esfuerzos que han hecho para salir de esta situación. Una vez más, los pobres de nuestra sociedad pagan la factura de las incompetencias y de la inmoralidad de los que tenían que preocuparse de los más pobres entre los pobres”.
“Nos dirigimos a la comunidad cristiana de la Ribera del Duero para que todos sepan que nosotros y el personal de este Centro hemos luchado hasta el límite de nuestras posibilidades; denunciamos a los que no respetan su palabra y desprecian a los pobres”, concluyen en el comunicado.